¿No os encantan esas magníficas mañanas soleadas de otoño donde el sol brilla con todo su esplendor haciendo resaltar el color de las hojas de los árboles: marrones, rojos, amarillos, naranjas…?
Y es que el otoño nos parece una estación del año maravillosa para casarse, cuando las temperaturas todavía son agradables y la belleza de la naturaleza esta latente en todas partes.
Es la época de la cosecha y que mejor idea para decorar nuestra boda que tomar esta referencia como punto de partida. Nosotros nos imaginamos unos centros de mesa a base de calabazas, frutos secos, piñas y espigas del campo. Mantelería color mango y ramilletes de espigas atados con lazos naranjas y marrones al respaldo de las sillas. Los marca sitios en cuadritos de madera y la lista de invitados por mesa colgadas de unos tablones de rafia.
Un entramado de globos de papel en colores crema y naranja colgando del techo asi como pequeñas lucecillas intercaladas. Una mesa en el centro del salon con cajas de madera, estilo las de las fruterías, y en ellas pequeños detalles para que los invitados eligan cual llevarse: una tarrina de mermelada, jabones naturales, saquitos de semillas todo ello con el nombre de los novios, la fecha y un gracias por venir..
La novia preciosa, con un vestido marfil vaporoso, a modo de ninfa del bosque, una guirnalda de florecillas en el pelo y un ramo de girasoles.
El novio guapísimo, vestido elegantemente con un traje marrón chocolate y florecillas en el ojal.
Si no lo podeis celebrar fuera, en el campo, os recomendamos que al menos os hagais fotos en un parque o jardín, y lo que sería ideal es que encargaseis una sesión de fotos de preboda y elijais una localización bonita como una zona de bosque etc, ¡os pueden quedar ideales !
Fuente:todonoviasymas
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