Cuando nos entregamos a nuestra pareja buscamos que el momento se dé tal y como lo habíamos soñado. Sin embargo, hay ocasiones en las que una simple e inofensiva expresión lo puede arruinar todo. Pues bien, aquí algunos ejemplos….
Apagamos la luz? No hay nada más ofensivo para una mujer que esta pregunta. Así sea para sugerir un ambiente más romántico, vamos a imaginar que a nuestra pareja no le gusta vernos desnudas y esto sí que nos hace sentir mal. Así que hombres, por favor, que de sus bocas no salga esta propuesta.
Dame un segundo, debo contestar esta llamada ¡Plop! Si realmente quieres matar la pasión del momento atrévete a atender el celular o el teléfono. Señores, entiéndanlo: en esos momentos necesitamos que ustedes nos hagan sentir lo más importante en sus vidas. Que nada interrumpa la ocasión.
Gordita! Ven para acá ¡Gordita! Te he estado pensado…. Etc. A ninguna mujer le gusta que le digan ¡Gordita!, no importa que lo hagas con el mayor cariño o que lo que siga después de esa detestable palabra sea una propuesta de matrimonio… ese término es deprimente, depresivo y mata pasión. Jamás, jamás lo uses.
Deberíamos salir con otras personas ¿A caso te aburres estando sólo conmigo? Será lo primero que piense tu enamorada. A las mujeres nos gusta la intimidad, compartir con la pareja sin que eso implique grandes reuniones o invitados. Somos posesivas y disfrutamos esos momentos de tranquilidad más que cualquier mega fiesta.
Hace frío, no me quites las medias Que parte de ‘desnudarse’ no entendieron. Por Dios, no hay nada mejor que hacer el amor libres de cualquier prenda sin importar el clima. Sentir al otro piel a piel es lo más sensual que existe así que, si tienes tiempo, quítate toda la ropa.
Uhmmm… no tengo condones Imperdonable ¿Por qué no están preparados? Si de verdad quieres un stop en seco pronuncia esta frase. Porque eso sí mujeres, nuestra seguridad es innegociable.
¿Te viniste? ¿A caso no leen el lenguaje corporal? Deberían ser más observadores y detallistas. Que pregunta más incómoda y odiosa. Además así no lo hayamos logrado les vamos a decir que sí. Un consejo, en vez de desperdiciar el tiempo haciendo cuestionamientos tontos, aprovéchenlo llenándonos de besos, caricias y mucha pasión
Oops, qué pena, no me aguanté Ni que no nos diéramos cuenta. Sin palabras… vistámonos y vámonos!
Ay María, Mariana, Mary… Nada peor que nos confundan con otra. Después de esto no queda mucho que hacer… la embarraron hasta el fondo.
Te gustó? Esta pregunta como ¿Te viniste? Es torpe. Señores, de verdad, jamás responderemos con sinceridad así que eviten hacerlas y más bien preocúpense por descubrir nuestro lenguaje corporal. Somos evidentes cuando algo nos gusta y cuando algo definitivamente no.
Fuente:terra
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